Los ciclos son definidos como “serie de fases o estados por los que pasa un acontecimiento o fenómeno y que se suceden en el mismo orden hasta llegar a una fase o estado a partir del cual vuelve a repetirse en el mismo orden”; como ejemplo podemos poner muchos: los ciclos lunares, solares, anuales, en fin… pero ¿qué hay de nuestros propios ciclos? Me refiero a los ciclos que iniciamos cuando entablamos una relación sea de amistad, negocios, familiar, romántica; ¿te has fijado que todas las relaciones siguen básicamente las mismas fases o estados que conforman un ciclo? Te invito a reflexionar un poco en ello, desde mi perspectiva los seres humanos somos cíclicos, repetitivos, mismas historias, mismos personajes, diferentes rostros.
Entonces, ¿por qué es importante poner atención a la forma en que cierras un ciclo? Porque definitivamente eso va a sentar la base de inicio de tu nuevo ciclo. ¡Así de sencillo!
Después de haber cosechado, los agricultores preparan la tierra antes de volver a sembrar. Si la cosecha fue buena o no, ya no importa; lo importante es prepararse para el nuevo ciclo, haciendo un buen cierre del anterior.
¿Qué es cerrar ciclos sanamente?
Agradecer, sí, dar gracias desde lo más profundo de tu ser por todo aquello que recibiste de la relación/situación o período que estás concluyendo, si tu percepción es que no te fue muy bien, que sufriste, te lastimaron, o no fuiste valorado, agradece, agradece porque te han mostrado algo que ya no quieres para el siguiente ciclo, agradece porque ahora puedes ver que mereces más.
En cada ciclo que termina hay tanto aprendizaje, hay tanta energía usada que es de suma importancia hacer consciencia que hay que recuperar lo que tú pusiste en esa relación.
Hacer un cierre sano implica recuperar la energía vital que tú aportaste y que además viene con ganancia si capitalizas el aprendizaje.
Tanto si haces un viaje de fin de semana, como si entablas una relación de negocios, familiar o romántica, sé consciente del inicio, progreso y conclusión; recupera tu energía y capitaliza el aprendizaje.
Te invito a hacer este ejercicio para cerrar el año que termina, agradece el camino recorrido y empodérate con todo lo que aprendiste, eso hará una buena preparación para tu siguiente año.
Es mi intención que te encamines lleno de amor y alegría infinitos a iniciar cada nueva relación en este nuevo año y que llegues a vivir una vida de plenitud.
Te invito a unirte a la Comunidad de Vidas en Plenitud de Facebook en donde encontrarás algunos videos que he compartido con mi Círculo de Vidas en Plenitud. Ahí encontrarás un video completo con un fortalecimiento específico para cerrar ciclo sanamente.
Amor y Alegría infinitos
Becky Morales – Asesora Holística